Que se acuerden de ti siempre es grato, pero que lo hagan en unos momentos para ellos difíciles lo hace aún mas. Hace muchos años llegó a mi barrio un matrimonio la chica argentina, tenían un niño de tres años y estaba embarazada de un segundo, cuando nació el bebé me preguntó si conocía a alguien de confianza para cuidar a los niños, yo le dije que podría ser yo (en aquel momento mis niños ya eran algo mayorcitos ya que el pequeño tendría por aquel entonces 14 años). Y así comencé a cuidarlos. Que me dejara al cuidado de los niños, aquel bebé de 3 meses me hizo pensar....No me conocía y aun así me dejaba al cuidado de sus niños....me llenó de un cariño hacia ellos que aún hoy sigue igual. Hoy esos niños ya tienen casi 18 y 21 años y siguen siendo "mis niños". Que a qué viene esto? Pues viene que hace un mes fallecía el papá allá en Argentina con lo cual ella se desplazó para acompañar a su mamá y a la vuelta me trae unas cositas culinarias de allá y entre ello venia el chocolate que usaba su papá que dicho se de paso era un excelente panadero y repostero. Así que estos cookies van para el recuerdo del señor "Pablo delgado" que seguro donde esté me hará un guiño.
Por supuesto que se puede poner cualquier chocolate como también harina común. Solo espero que os gusten 😉
Ingredientes
200 gr de chocolate 100
para derretir y 100 picado fino
50 gr de mantequilla
75 gr de azúcar de coco
1 huevo
150 gr de premezcla
½ cucharadita de
levadura (tipo roya) pizca de sal
Preparación
En un bol ponemos 100 gr de chocolate junto con la mantequilla y lo vamos calentando en el microondas de pocos en pocos segundos que no hierva, vamos removiendo hasta que con el mismo calor se nos deshaga bien.
En otro bol ponemos el
azúcar y el huevo, batimos bien y añadimos el chocolate que tendremos ya
derretido y templado, seguimos batiendo e incorporamos la harina, levadura y la
pizca de sal. Mezclamos bien con una espátula, cuando ya estén los ingredientes
bien integrados echamos los otros 100 gr de chocolate que tendremos picado en
trocitos. Hacemos montoncitos con ayuda de una cuchara y los ponemos en la
bandeja de horno forrada con papel de hornear. Dejamos espacio entre los
montoncitos pues algo crecen y horneamos (en horno previamente calentado) unos
10 minutos más o menos.
¡¡Hola Fely!! Creo que tú encontraste una buena familia y ellos en ti, una buena persona, por eso el afecto dura hasta el día de hoy. Y que se acuerden de ti en un momento tan difícil, también dice mucho del afecto que te tienen. Y mira qué galletas tan fantásticas te han salido, con este chocolate tan especial venido de tan lejos. Una delicia, y más para los que nos encanta el chocolate. Besitos.
ResponderEliminarHola mi Fely .
ResponderEliminarLas buenas personas se presienten y ella no se equívocó contigo amiga . Seguro que ese cariño permanecerá de por vida .
Las galletas son extraordinarias , te quedaron de escaparate totalmente.
Daba buena cuenta ahora mismo de una o de dos ja ja.
Un abrazo.
Bego de Acordes Culinarios
Que bello es encontrar familia cuando se emigra....tu aumentaste la familia y con ello aumento el amor hacia ti y el amor que tu das.....alegrate que no este cerca tuyo porque me comeria todas tus galletas!!....Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarUnas cookies hechas con cariño, además de buen producto, es lo más rico del mundo. Cuando hay buenas personas detrás de ellas, que muestran gratitud y generosidad en cualquier momento de su vida, todo sabe el doble de bien. Pero es que estoy segura que tú te lo mereces.
ResponderEliminarBss
Es muy bonita tu entrada de hoy Fely, con mucho sentimiento, de ese modo las cookies han de ser una delicia y seguro que el señor Pablo Delgado te hará ese guiño de ojo tan merecido.
ResponderEliminarBesos.
Buenos días corazón, te comentaba ayer en IG, que la mamá de esos niños, supo ver la buena persona que hay en ti, y que la amistad y el cariño, perdure a lo largo de los años, es signo de lao bien que hiciste el esfuerzo que supone cuidar a los niños, especialmente cuando son de otras personas, porque el cariño que se les toma es inevitable, y si después de tantos años perdura, será por algo.
ResponderEliminarQué bien te conocen, trayéndote ese chocolate sabía que en tus manos, acabaría en algo bien rico. Un tributo hecho con cariño, siempre sabe más rico.
Besos y mis condolencias a la familia de tus niños.
Buenas tardes, Fely: la suerte hizo que os encontrarais esa familia y tú. Y la madre de las criaturas valora lo bien que lo hiciste y el haber encontrado a una persona que cuidó a sus hijos como a los propios. Y es de bien nacidos, ser agradecidos y te ha traído ese presente sabiendo que, en tus manos, se iba a convertir en una delicia. Y con tus cookies has hecho un bonito homenaje al abuelo de esos niños, Don Pablo Delgado.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte.
Fely el chocolate para taza Aguila me acompaña desde la niñez ya que fue uno de los primeros. ¿Sabes? en aquella època este chocolate venìa envuelto en su interior con papal aluminio y mi padre me hacìa con èl casitas iluminadas para poner sobre la tarta de cumpleaños.
ResponderEliminarBesos
Un post con sentimiento y cargado de cariño y unas cookies que estoy segura quedaron deliciosas. Besitos.
ResponderEliminarHola Fely. Lo que has escrito nos demuestra que a pesar de todo hay personas con un corazón que rebosa bien hacer y entre las que te encuentras tú.
ResponderEliminarEs en los momentos difíciles cuando sale lo mejor de cada uno y tú lo demostraste y se lo enseñaste a esa familia creando para siempre unos lazos que, a pesar del tiempo, siguen siendo indestructibles.
Ese detalle que ha tenido trayéndote un chocolate que utilizaba su padre demuestra que también esa persona es agradecida y que conociéndote sabías que lo ibas a apreciar mucho.
Y tanto que lo has apreciado ya que has hecho estos cookies que con solo verlos ya están pidiendo ser saboreados.
Sensacionales y además bonito homenaje a su padre.
Un abrazo.
Così cioccolatosi li adoro, troppo golosi!!!
ResponderEliminarFely, que bonita entrada la de hoy, y que emocionante.
ResponderEliminarUn abrazo.
Nada mejor que poner tu corazón homenajeando a ese gran repostero y ponerte a preparar tan deliciosos cookies.
ResponderEliminarPara esos niños tú has sido una segunda madre y es lógico que entre tú y ellos se creasen lazos de verdadero cariño.
Como madre que eres, te deseo que disfrutes de un maravilloso día en su compañía.
Cariños.
Kasioles
Esas galletas estarán deliciosas sólo porque incluyen ingredientes que te trajeron desde el cariño. Seguro que luego les llevaste unas poquitas y las disfrutaron todos juntos!
ResponderEliminarFely , estoy segura que tuvieron a la mejor cuidadora del mundo . las galletas riquisimas
ResponderEliminarbesinos
Hola Fely. ¡Qué historia tan bonita! Esos niños siempre llevarán un trocito de tí en su corazón. Deliciosas te han quedado estás cookies. Un abrazo.
ResponderEliminarUne belle histoire d'amitié. Tes cookies semblent délicieux.
ResponderEliminarJ'aime beaucoup.
A bientôt
Beautiful blog
ResponderEliminarEsta receta es doblemente dulce, porque además de las cookies que se ven buenísimas, también se ve que detrás de las mano de la cocinera hay una gran persona que perdura en el recuerdo de quienes convivieron con ella.
ResponderEliminarUn doble besazo buena persona ❤️❤️